El Derecho y los valores (la filosofía de los valores)
¿ Es el Derecho un valor? Para dar respuesta a esta interrogante debemos definir previamente en qué consisten los valores.
Los valores son objetos ideales que tienen vocación de ser realizados, pretensión de imperar sobre el mundo y encarnar en él a través de la acción del hombre.
Es de la "razón" en cuanto atributo esencial de la naturaleza humana, el planteo de la existencia individual y social como un orden valorativo (axiológico). En el reino de la naturaleza primaria, dada la ausencia de razón (capacidad para discernir, darse cuenta) de los organismos que integran los ecosistemas naturales, es un importante ontológico la existencia de la angustia axiológica.
Es del hombre y sólo de él la configuración de la vida en términos "existenciales", entendiendo por ello el desgarro que produce en la conciencia, en el espíritu humano, la ruptura de ese orden natural fatal (la identidad o armonía del árbol, del animal, con su entorno ecológico).
Nada mejor que unos versos que citará Henrique Meier, lenguaje ancestral anterior a la historia, para expresar esa angustia existencial:
"... Pero soy hombre
una sensibilidad encajonada aquí (entre piel y huesos),
un grito de soledad,
un darse cuenta de la inevitable muerte y del dolor".
O la súplica del poeta Eduardo Viloria Vera:
Reloj no te detengas,
porque la vida
no tendría sentido
y en este preciso momento
es posible que
la humanidad no exista".
Y ese desgarro, ese darse cuenta de la vida y la muerte, ha hecho del hombre un ser susceptible de darle a su existencia determinado "sentido", es decir, trascender de lo puramente natural haciendo de la vida un proyecto en el tiempo, estableciendo un orden de prioridades, unas metas. Tal es el origen de los valores.
Los valores son los que nos orientan y presiden las grandes decisiones. Desgraciadamente, por las condiciones inhumanas de trabajo, por educación o por miedo, muchas personas no se atreven a decidir conforme a su vocación, conforme a ese llamado interior que el ser humano escucha en el silencio del alma".
Los valores son una suerte de "paradigmas de realización", la motivación básica de la conducta humana (Ernesto Sábato).
Concluyo en está primera entrega diciendo:
Si no hay Libertad en el sentido más radical de la expresión, es decir, si no podemos reconocer nuestra identificación con el Bien o con el Mal (con el bien y con el mal), como auténticamente nuestra, como fruto de nuestra actividad y no de nuestra pasividad o de nuestra inercia, la ley se hace absolutamente inteligible; he aquí lo podríamos llamar el argumento ontológico a favor de la Libertad. Si no hay Libertad, la ley no es impracticable o superflua, sino absurda e incomprensible, no puede ser leída en modo alguno; pero es el caso que la ley es leída y cumplida (todos lo leemos y comprendemos a través de ella); luego somos libres en el sentido más fuerte de la expresión, que es la que afirma, repito, que movemos sin ser movidos, que nuestro principio es creador de acciones y no pasivo o inercial.
Las elucubraciones más o menos sutiles sobre elección, decisión, preferencia, opción y similares olvidan o ignoran que la cuestión de la Libertad se plantea a raíz de la misma acción, enfrentando el hacer y el padecer, el ser sujeto y su cosa, productor y producto".
Afirmamos la valentía por oposición a la cobardía, La Paz ver sus la guerra, la bondad versus la maldad, la democracia versus la dictadura, la verdad versus la mentira.
¡ Qué reto tan descomunal el del ser humano! Salir del vientre de la madre, iniciar este viaje lleno de incertidumbres, saber que la muerte puede sorprendernos una mañana cualquiera "cuando estos débiles hilos que nos unen a la vida, no resistan un nuevo amanecer".
La Libertad se nos ofrece, se nos presenta como un gran valor existencial, como derecho ineludible, pero también es muy personalísimo el cual ante una férrea y firme de decisión de luchar por ella sin miedo a las responsabilidades que se adquieren al alcanzarla. Está se asume y se comparte de forma colectiva con derechos y deberes, profundamente con carácter Humanista y Republicano.
Viva la Libertad Muera la Tiranía en VENEZUELA y en la América Latina
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