*_“El periodista no busca el poder sino el servicio, y es así como descubre su vocación: por el entusiasmo y pasión con que se sirve al público con información de calidad”._ Javier Darío Restrepo*
El día 10 de diciembre se cumplieron 110 años del nacimiento de una de las personalidades más connotadas de los medios de comunicación: Manuel Isidro Molina Gavidia. Polifacético en oficios y profesión. Tipógrafo, Locutor de Radio, Periodista autodidacta, Técnico en periodismo, Licenciado en Periodismo y docente en periodismo de la Universidad Central de Venezuela (UCV). Es de este trujillano, que fue corresponsal del diario El Nacional en Valera, padre del periodista Manuel Isidro Molina, que recordamos su alumbramiento y celebramos su legado de amor, integridad y generosidad. Desde joven se dedicó a la autoformación y son notable sus logros académicos, se especializó en “Técnica Gráfica”, luego “Diseño Gráfico” y también “Periodismo”, en sus días aún no se hablaba de comunicación social. También destacó en la docencia universitaria. En la UCV fue Profesor Asociado, Jefe de Cátedra y Director de la Escuela de Periodismo. En su largo recorrido de vida, igualmente fue una figura de relevancia en la lucha gremial, particularmente en la Asociación Venezolana de Periodistas (AVP). Su esfuerzo y entrega, su bondad, dejaron profundas huellas no solo en sus familiares, sino también en todos los que lo conocieron. Aunque no tuve la dicha de conocerlo, me complace dejar testimonio de su legado.
Manuel Isidro, padre, dejó un legado vivo: ejemplo de ética, empatía y fortaleza. Su memoria es un faro que ilumina la toma de decisiones y su forma de apoyar a los demás. Que este día sea un recordatorio de todo lo bueno que dejó y de todo lo que aún puede crecer a partir de ese legado que fue su pluma y sus obras literarias, entre las que se cuentan: La libertad de prensa en Estados Unidos de Norte América - La Prensa en el mundo socialista. Editorial Cantaclaro, Caracas, 1961. Cómo calcular originales - Catálogo de la Imprenta Universitaria. Imprenta Universitaria (UCV), Caracas, 1964. Diagrámetro-Molina (Regla para diagramadores de impresos e instructivo para su uso). Folleto. Imprenta Universitaria (UCV), Caracas. Primera edición: 1966; Segunda edición: 1972; Tercera edición: 1981. Humorismo Trujillano. Imprenta Universitaria (UCV), Caracas, 1966. Un día de provincia en los diarios de Caracas (Investigación sobre la información de provincia en los diarios de Caracas y estudio técnico sobre la composición gráfica de los diarios capitalinos). Edición multigráfica, 1970. Efectos de la comunicación colectiva en la educación popular (Trabajo de divulgación). Edición multigráfica, 1970. Escuela de Comunicación Social. Planes de estudio desde 1974 a 1975 y nómina de egresados de 1949 a 1974. Imprenta Universitaria (UCV), Caracas, 1975. Plan de Nivelación Académica para periodistas prácticos. Edición multigráfica, 1973. (Proyecto presentado para su consideración ante las siguientes instancias académicas: Consejo de Escuela de Comunicación Social, Consejo de Facultad de Humanidades y Educación y Consejo Universitario de la UCV, y ante el Consejo Nacional de Universidades). El periodista científico en el desarrollo independiente de los pueblos. (Ponencia sobre tema 1, Documento No. 1, Primer Congreso Iberoamericano de Periodismo Científico). Folleto editado por el CPCV. Imprenta Universitaria (UCV), Caracas, 1974. VALERA, La ciudad misterio. (Palabras pronunciadas en el Concejo Municipal del Distrito Valera, Estado Trujillo, con motivo del "Día de Valera", el 24 de junio de 1973). Folleto. Imprenta Universitaria (UCV), 1975. Rangel no fue doctor, sólo un docto superior a doctores de su tiempo. Edición del CPCV. Imprenta Nacional, Caracas 1978. El periodista en la sociedad venezolana. Publicaciones "Simón Rodríguez", Oficina de Prensa, Concejo Municipal. El Tigre, Estado Anzoátegui. Cuaderno No. 5, agosto 1976. Sin contar miles de artículos de prensa en diarios y otras publicaciones de Caracas y de provincias.
En la formación izquierdista de Manuel Isidro y la actividad política como militante y dirigente del Partido Comunista de Venezuela (PCV), desataca su ejemplo de dedicación y respeto con una visión sin par entre los que hoy dicen ser comunistas, visión encomiable compartida con aquellas personalidades fundadoras del PCV como Rodolfo Quintero, Kotepa Delgado, Miguel Otero Silva, Juan Bautista Fuenmayor, Fernando Key Sánchez, Miguel Acosta Saignes, Raúl Osorio, Pío Tamayo Gustavo Machado, Salvador de la Plaza, entre otros seres de gran estatura intelectual, honestos y honrados. Como ello pareciera contradictorio, difícilmente creíble por el contexto que nos envuelve, en bueno traer a colación unas esclarecedoras palabras de Boris Yeltsin, ex presidente de Rusia, sobre lo que llamaría paradoja del comunismo: “Por eso se dice que nadie que sea comunista y honesto puede ser inteligente, nadie que sea comunista e inteligente puede ser honesto, y nadie que sea honesto e inteligente puede ser comunista”.
Lo antes citado, lo aplico a Manuel Isidro, en cuanto excepción de esa supuesta regla, con mayor razón siendo innegable la honradez que lo caracterizó, que no guardaba odios a sus adversarios políticos, y de una incuestionable intelectualidad, preocupado por su gremio, tanto así, que logró la nivelación académica que quienes ejercían el periodismo empíricamente. En la actualidad, resulta difícil ver esos atributos en los que hacen alarde de su tendencia comunistoide, para muestra un botón, los odios sembrados por el difunto eterno, un legado con una subyacencia comunista tristemente célebre. Manuel Isidro en el año 1975 recibió de manos del presidente Carlos Andrés Pérez, la condecoración Francisco de Miranda, en su segunda clase, que es mucho decir, porque Carlos Andrés fue Ministro de Relaciones Interiores en el gobierno de Rómulo Betancourt, ganándose la fama de "policía implacable" por su mano dura contra quienes militaban en el partido comunista, entre ellos, Manuel Isidro; no obstante, mostró su magnanimidad en ese momento en Miraflores e igualmente hizo lo mismo en 1997, cuando el presidente Rafael Caldera le otorgó la Orden Francisco de Miranda, en su primera clase. Con eso, Manuel Isidro nos dejó un ejemplo invalorable: no ser presa de antagonismos dañosos nos adversan en lo político. De tal manera, que hoy celebramos la vida de un hombre excepcional y el impacto de su enseñanza: servir con corazón, amar sin medida y vivir con honestidad. ¡Unas de las glorias del periodismo!
Cualquier información o sugerencia por robertveraz@hotmail.com robertveraz@gmail.com grsndz629@gmail.com o bien por mí teléfono 0414-071-6704 y 04141574645. Además pueden leer esta columna en mí página Web: https://robertveraz4.webnode.es/ y sigan mis comentarios y opiniones por @robertveraz en twitter e Instagram. Pueden ver mis videos en YouTube: Tips de @robertveraz. ¡Hasta la próxima semana, Dios bendiga a Venezuela!
Déjanos saber tu opinión en los comentarios más abajo y no olvides suscribirte para recibir más contenido sobre noticias
FUENTE: >>Robert Alvarado
Si quieres recibir en tu celular esta y otras noticias de Venezuela y el mundo, descarga Telegram, ingresa al link Https://t.me/NoticiaSigatokaVenezuela.
.jpg)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
GRACIAS POR EMITIR TU OPINIÓN
Todos los contenidos publicados en este sitio web son propiedad de sus respectivos autores. Al utilizar este sitio web afirmas tu aceptación sobre las Condiciones de uso, la Política de privacidad, uso de cookies y el Deslinde de responsabilidades legales.