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martes, enero 01, 2019

El año ni empezó bien y ya tenemos un hueso atrapado en nuestras gargantas.

RENATO SANTOS 01/01/2019

La situación de Europa en relación con los inmigrantes que ya estaba peor en 2018, podría dar mucho dolor de cabeza a Francia e Italia.


En Francia los "amarillos" tenían como excusa el aumento de los combustibles, el gobierno retrocedió sin embargo, el infierno no paró y en Italia un equipo de reportaje que hacía una materia delante de una estación de tren central fueron agredidos físicamente.





Europa se fudendo@europasefudendo

Repórter italiana é agredida por imigrantes.

Mientras que Michel Temer intentó arreglar la Ley de Inmigración con decretos presidenciales, los críticos entrevistados por la Folha de São Paulo, dieron razones, pero ahora esa cuenta se ha quedado para el Presidente Jair Bolsonaro a resolver.

El 19 de noviembre de 2018, el presidente electo Jair Bolsonaro (PSL) conversó por teléfono con el primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, "Él está muy contento con nuestra victoria [en la elección], seremos grandes socios en el futuro" , afirmó Bolsonaro durante una entrevista en Río de Janeiro.

"Hungría es un país que ha sufrido mucho con el comunismo en el pasado", dijo el futuro presidente, que también criticó la ley de inmigración que está en vigor en Brasil. "Fui contra esa última ley, que transformó a Brasil en un país sin fronteras", declaró.

"Si esa ley sigue en vigor, cualquiera puede entrar [en Brasil] y llega con más derechos que nosotros", evaluó.

Antes de ir al banco, frente a su casa, también criticó la actuación de organizaciones no gubernamentales (ONG) y defendió que no recibían fondos públicos.

Y en Brasil camina hacia la misma situación ya que existe el artículo 123 que prohibe la detención de esos individuos, ese artículo necesita ser modificado en régimen de urgencia.

En caso contrario corremos serios riesgos de ser agredidos por esa gente que van a pensar que están libres de cualquier control y respeto en nuestras legislaciones quedó para el nuevo gobierno JAIR BOLSONARO resolver.

"La nueva Ley de Migración, que sustituye al Estatuto del Extranjero y define los derechos y deberes" del migrante y del visitante, regula su entrada y estancia en el país y establece principios y directrices para las políticas públicas para el emigrante ".

La nueva legislación no considera más el inmigrante una amenaza a la seguridad nacional y, según expertos, se regula por los derechos humanos, un error que necesita ser revisado.

Cuando la ley fue sancionada, con vetos, por el presidente Michel Temer, en mayo de este año, el texto fue bien recibido por organizaciones de defensa de los derechos humanos, una vez que fue elaborado durante varios años en conjunto con representaciones de la sociedad civil y contempla principios como la no discriminación, la lucha contra la homofobia y la igualdad de derechos de los trabajadores inmigrantes y nacionales.

Uno de los principios contenidos en la ley, por ejemplo, es la "no discriminación en razón de los criterios o de los procedimientos por los cuales la persona fue admitida en territorio nacional".

El decreto reglamentario no puede contrarrestar la ley, pero justamente esta crítica está siendo hecha al presidente por diversas organizaciones de defensa de los derechos de los migrantes, así como por la Defensoría Pública de la Unión (DPU).

"El decreto tiene aspectos claramente contrarios a la propia Ley de Migración, como la previsión de prisión del migrante que será deportado, cuando el artículo 123 de la ley expresamente prohíbe privación de libertad por razones migratorias", declaró Camila Asano, coordinadora de Programas de la Conectas Derechos En el caso de las mujeres.

La DPU considera temas sensibles "la concesión de visados, el acceso a servicios y programas sociales y la mayor participación de los migrantes en las decisiones sobre política migratoria en Brasil", según la conclusión de un encuentro que, en agosto, discutió la reglamentación de la nueva ley.

Entienda algunos de los principales cambios introducidos por la nueva Ley de Migración de Brasil y lo que el decreto de reglamentación cambia en ella.

1. Visados

Lo que dice la nueva ley: la concesión de visados ​​temporales para acogida humanitaria fue institucionalizada con la nueva ley, que da visto de un año "al apátrida o al nacional de cualquier país" en "situación de grave o inminente inestabilidad institucional, de conflicto armado, de calamidad de gran proporción, de desastre ambiental o de grave violación de derechos humanos o de derecho internacional humanitario, o en otras hipótesis ".

Así, el visado temporal humanitario utilizado por los refugiados haitianos desde 2010, por ejemplo, se ha consolidado. La ley también garantiza que el extranjero no debe ser deportado o repatriado si corre el riesgo de morir o de sufrir amenazas a su integridad personal al retornar al país de origen.

Lo que dice el decreto: prevé un acto conjunto de los ministros de Justicia, Relaciones Exteriores y del Trabajo para definir condiciones, plazos y requisitos para la emisión del visado. Otro acto conjunto de los mismos ministerios "podrá establecer instrucciones específicas para la realización de viaje al exterior del portador del visado" - según los críticos, estos procedimientos podrán retrasar la concesión de visados.

Otra crítica hecha por organizaciones de defensa de los migrantes se refiere a las tasas cobradas para la emisión de cédulas de identidad, de las cuales algunos inmigrantes, dependiendo de la situación, estaban exentos (por ejemplo los refugiados).

2. Reunión familiar

Lo que dice la nueva ley: concede el visado o permiso de residencia, "sin discriminación alguna", el cónyuge o compañero del inmigrante, a hijos de inmigrante con permiso de residencia ya otros familiares de hasta segundo grado (nietos o hermanos, por ejemplo).

Lo que dice el decreto: pide que los familiares de asilados políticos estén en territorio nacional para que ocurra la reunión, lo que muchas veces no es posible porque la mayor parte llega al país sola y después quiere traer a la familia.

3. Expulsión, deportación y repatriación

Lo que dice la nueva ley: El extranjero en situación irregular en Brasil no podrá ser arrestado.El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva,

La situación migratoria de un inmigrante en vías de expulsión se considerará regular si su proceso está pendiente de decisión.

Refugiados o apátridas, "de hecho o de derecho", menores de 18 años separados de la familia o personas que necesitan acogida humanitaria no serán repatriados.

La ley también garantiza que el extranjero no debe ser deportado o repatriado si hay razones, en el país de origen, que coloquen la vida o la integridad personal de él en riesgo - algo que no quedó definido en el decreto.

Lo que dice el decreto: determina que apátridas, refugiados o asilos políticos no serán repatriados, deportados o expulsados ​​"mientras haya proceso de reconocimiento de su condición pendiente en el país". También prevé que "la persona en situación de impedimento de ingreso" y que no pueda ser inmediatamente repatriada "será mantenida en libertad vigilada hasta su devolución al país de procedencia o de nacionalidad", lo que contradice la ley.

4. Derecho de manifestación política

Lo que dice la nueva ley: elimina la prohibición de participación en actividades políticas por extranjeros del Estatuto del Extranjero y garantiza el derecho del inmigrante de asociarse a reuniones políticas y sindicatos.

La nueva Ley de Migración no prevé el derecho al voto a los inmigrantes, lo que está prohibido por la Constitución. Puede tener una "trampa" en la Ley de Inmigración.

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