Los profesionales que integramos el equipo de defensa de los Derechos Humanos (DDHH) de los Zulianos, preocupados por el impacto que pueda tener en la población zuliana la pandemia COVID-19 (Coronavirus) y las medidas que ante ella se adopten, nos pronunciamos de la siguiente forma:Primero: Apoyamos y promovemos las medidas de prevención del Coronavirus, adoptadas por las diferentes autoridades nacionales, estadales y municipales en el poder. Para lo cual ponemos nuestra red de defensores de DDHH a la orden de la ciudadanía en general, y en especial de las fuerzas del orden, a objeto que se cumpla con los fines de esta contingencia, con estricto respeto de los Derechos
Humanos y de la vigente Constitución de la República Bolivariana de Venezuela.
Segundo: Advertimos que, la experiencia global y en particular en Venezuela, es que las medidas de excepción, son caldo de cultivo para excesos de la fuerza pública, situación que preocupa frente al consabido tema de abuso de poder, corrupción y extorsión, de algunos funcionarios. Cuestión que ya se viene registrando en denuncias informales en las diferentes RRSS, especialmente con lo que tiene que ver con el libre tránsito y el abastecimiento de combustible. Hechos que deben investigarse y resolverse en lo inmediato.
Tercero: Advertimos que en Venezuela no existe toque de queda, ni prohibición de la actividad laboral general, sino una serie de restricciones preventivas que todos debemos asumir con conciencia. Pero, ante la amenaza de una profundización de nuestra ya grave crisis económica y de abastecimiento, la autoridad pública, debe facilitar y no limitar, las actividades protegidas en los propios decretos de alarma, en especial, las referidas al abastecimiento y producción de alimentos, telecomunicaciones, medios de comunicación, transporte, entre otros. Para lo cual, es urgente que se liberen los controles del suministro de combustible en general.
Cuarto: Solicitamos se habilite, cuando menos, un hospital por subregión de la gran extensión del territorio zuliano (Perijá, Sur del Lago, COL y Goajira), con sus propios kits de diagnóstico y con la capacidad de atender una contingencia que se potenciará en las próximas tres semanas, tal como lo determinan los expertos epidemiólogos, en relación al desarrollo natural de la pandemia; ante lo cual, el Hospital Universitario de Maracaibo, pudiera resultar insuficiente y muy distante para los habitantes del interior zuliano.
Quinto: Urgimos del poder central, la implementación de un mecanismo económico de compensación directo para un aproximado de 10 millones de trabajadores, industriales, comerciantes y empresarios; toda vez que, la frágil economía venezolana, está constituida mayormente por personas al servicio de la economía informal y del sector terciario de la misma; por ende, no existen grandes industrias que puedan soportar tener a su personal asalariado en sus casas durante una cuarentena. Situación peligrosísima para la paz y la estabilidad social, y ante la cual, el Carnet de La Patria como solución anunciada, es lógicamente inviable.
Ponemos a la orden nuestra cuenta, para la denuncia de eventuales violaciones a los derechos humanos: @SomosDDHHZulia en todas las redes sociales.
En Maracaibo, a los diecisiete (17) días del mes de marzo de 2020
Abog. Mario Torres Carrillo
Por el Colegio de Abogados del Zulia
Abog. Victor Velasco Prieto
Por la Comisión de DDHH-Zulia
Abog. Jesús Vergara Peña
Por la Federación de Abogados de Venezuela (FCAV)
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