El modelo económico chino está entrando en crisis, ya que algunas de sus palancas fundamentales también se están agotando: La burbuja inmobiliaria vinculada a un mercado de préstamos en la sombra insostenibles, una economía basada en el control de las materias primas y la manufactura intensiva, y una curva demográfica que cada vez favorece menos el modelo de producción con mano de obra intensiva que ha alimentado el fuego de la época más próspera de su historia desde hace al menos cuatro siglos.
Aunque todavía es pronto y quedan muchos años por delante de dominio mundial en muchas materias, el liderazgo chino será relevado por el de otras potencias emergentes, y también el de aquellas potencias tradicionales, como los Estados Unidos de América, que están sabiendo capear el temporal provocado por la fábrica del mundo con la suma de más innovación radical y energía barata. Esto es lo que viene en un modelo teórico donde china se agota, y el nuevo orden económico mundial tendrá como protagonistas a potencias que ni te imaginas.
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