Farol Rebelde: ¡Una larga espera, un cambio para siempre!

Nos ha tocado esperar mucho. 

El cambio en Venezuela se ha demorado, y es que no enfrentamos a una facción política cualquiera.

De acuerdo con lo que hemos ido conociendo, estamos frente a una organización con implicaciones y relaciones con diversos sectores políticos estatales, actores de la delincuencia organizada y grupos de violencia para estatal estatal, como guerrilleros y terroristas. 

Este entramado bien armado cuenta con mucho dinero, producto del tráfico de oro, cocaína y petróleo, siendo la corrupción el aperitivo que logra cómplices. En este gran negocio, solo están los privilegiados de la cúpula cívico-militar transnacional.

Esta realidad, tan compleja, es el principal factor para entender la demora en la salida de Maduro y su narcodictadura. Por supuesto, también se han cometido errores desde el campo opositor, lo que ha contribuido a este retardo.

Desde el 28 de julio de 2024 hasta la fecha, ya han transcurrido 16 meses que se suman a los tantos años del chavismo-madurismo en el poder. Sin embargo, este momento es el más cercano a la salida.

Contamos con pruebas de un triunfo electoral, un liderazgo muy claro y un respaldo internacional que no está jugando a la ligera.

¿Cuánto tiempo más será la espera? No lo sabemos. Las fuerzas que se desarrollan en los organismos internacionales han estado jugando su rol de presión externa, mientras que, debido al miedo y la represión, la presión interna está silenciada. 

Por eso, es fundamental levantar la voz. Debemos organizarnos y demostrar que queremos una Venezuela libre. Donald Trump y Marco Rubio están moviendo sus piezas; nos toca mover las nuestras.

Es imperativo pedirle a la dirigencia nacional que promueva y dirija acciones concertadas y sincronizadas, jornadas de presión interna que terminen de desplomar a este régimen. 

Ojalá se entienda que al miedo hay que vencerlo, y no hay otra manera que a través de la presión interna, los más interesados en que esto termine somos los ciudadanos, con una conducción segura los riesgos deben asumirse. La calle hace falta. 

¿La tomamos? ¿Nos convocamos?

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FUENTE: >>R/S/W

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